El tabaquismo afecta negativamente a la evolución del asma, por lo que su tratamiento es fundamental. Los asmáticos tienen más dificultad para dejar de fumar y se aconseja una terapia más prolongada, obteniendo mejores resultados si se asocian fármacos y terapias psicológicas.
Estudio experimental aleatorizado en pacientes asmáticos que se incluyeron en dos grupos de intervención. El grupo al que se le realizó una intervención básica (grupo A), recibió consejo básico e información sobre los beneficios de dejar de fumar. Por otro lado, al grupo que recibió una intervención avanzada (grupo B), se le realizó una terapia multicomponente, que incluyó medicación (si procedía y/o aceptaba el paciente) y una terapia cognitivoconductual. Todos los pacientes fueron diagnosticados y tratados de su asma según GEMA 4.3 y se midieron, además de los parámetros funcionales y espirométricos, los niveles de motivación para dejar de fumar y estadio de cambio, el nivel de dependencia física a lanicotina y confirmación del cese del tabaquismo por cooximetría.
Incluimos a 27 pacientes en el grupo A y a 33 en el grupo B, de los que 42 (70%) fueron mujeres y la edad media fue de 49,18 (±13,47) años. La mayoría de nuestros pacientes se encontraban en un estadio de motivación al cambio contemplativo para el abandono del tabaco y el trastorno psicológico más frecuente fue la ansiedad, (80% de los pacientes). El 77% de los pacientes tenía un Fageström fuerte o moderado. A los 6 meses la abstinencia confirmada fue del 14,8% en el grupo A y del 45,4% en el grupo B (p = 0,005).
La intervención avanzada obtiene mejores resultados que la intervención básica para dejar de fumar en los pacientes asmáticos.
asma, tabaquismo, intervención básica, intervención avanzada, terapia multicomponente.
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